El Carmen Indautxu

Historia

Orígenes de la Presencia de Las HH. Carmelitas En Bilbao

Colegio Nuestra Señora del Carmen de Deusto

Doce años tardó en entrar la congregación en tierras del Norte, desde que recibiera la propuesta hasta que se abrió la primera casa. En 1858, D. Mariano J. de Ibargurengoitia, párroco de San Antonio Abad, pidió Hermanas para una fundación que pensaba llevar a cabo en Bilbao. Se denegó su solicitud por la escasez de personal. Volvió a insistir sin éxito para otras dos fundaciones. Esto no le desanimó y por tercera vez, el 27 de octubre de 1870, propuso otra fundación. En esta ocasión obtuvo una respuesta favorable y en compensación por las negativas anteriores, en 1878, se le concedieron dos fundaciones, la de Zumaya ( Guipuzcoa) y la de Deusto que, por entonces, era un municipio de Vizcaya, situado junto a la ribera de Deusto, muy próximo a Bilbao.

Don Mariano hizo la propuesta a la superiora general - Madre Paula del Puig- el 12 de junio de 1877. Se trataba de montar un centro de enseñanza en la casa que cedía una señorita, Doña Vicenta Gorocica, que se mantendría con las rentas que dejaba para ello. La propuesta de D. Mariano se basaba en los siguientes términos: la casa tendría dos pisos, el primero como habitación de las Hermanas y en el segundo - que debería edificarse- se instalarían las clases.; en la cochera se construiría la capilla con su pequeño coro y, además dispondrían de una pequeña huerta contigua. En la asignación económica contarían con 5.500 reales para manutención de las Hermanas, 2.200 para el capellán, y el producto de sus labores. En cuanto a sus obligaciones, las Hermanas deberían atender dos clases gratuitas y una dominical.

Madre Paula contestó que, a pesar de las múltiples peticiones que le llegaban, D. Mariano sería el preferido y que ella misma, en persona, acudiría a Deusto a conocer a la fundadora y a ver las obras.

Las Hermanas madre Rosa Cedrás y otras cuatro Hermanas que componían la comunidad, se instalaron allí el 26 de febrero de 1878. Para iniciar la fundación, les acompañó la provincial de Castilla. El obispo de Vitoria había concedido el permiso de forma oral, pero ahora ratifico por escrito su consentimiento, nombrando, además, confesores y capellán. El Ayuntamiento de Deusto concedió una subvención de 500 reales para que las Hermanas pudiesen pagar una aguadera que les transportase el agua necesaria para las niñas y la limpieza de las clases.

Al mes de iniciarse la escuela tenía ya mucha matrícula, las niñas iban contentas, también funcionaba la escuela dominical y con algunas niñas de pago se ayudaban al sostenimiento, ya que les estaba prohibido montar en el edificio de la fundación un internado.

Tal como constaba en el acuerdo, el colegio Ntra. Sra. del Carmen de Deusto figuraba como un patronato creado por Dña. Vicenta Gorocica. Con el tiempo, y como sucedía con frecuencia en estas fundaciones, la asignación de las Hermanas se había convertido en un mero símbolo. La casa, ya vieja, estaba necesitada de obras. Esta progresiva carencia de medios económicos supuso que, en 1914, las Hermanas se independizasen del patronato con el fin de disponer de mayor libertad.

En 1940 se cerró la fundación de Deusto y se dispuso que las Hermanas fueran destinadas a reforzar las dos fundaciones establecidas en la parte más céntrica de la capital vizcaína, el colegio Santa Teresa de la calle Barraincúa y el de Ntra. Sra. del Carmen del barrio de Indauchu. ( Hª Documental II, pág 323-324 y 352)

Colegio Nuestra Señora del Carmen de Bilbao

Este colegio está situado en el popular barrio de Indautxu, en una zona céntrica de Bilbao, y por ello lo conocemos como " el colegio de Indautxu" título compartido, igualmente, con el colegio de los Jesuitas, por idéntica razón.

El día 1 de octubre de 1933 se abrió una Academia de Señoritas, bajo la advocación de Ntra. Sra. del Carmen, en la calle Manuel Allende 18, destinado a Segunda Enseñanza, en respuesta a la solicitud de Hermanas que hizo el Licenciado Sr. Cuadrado. Se alquiló un chalet conocido como Torre Verde, debido al color de su tejado.

El Sr. Cuadrado compartía con las Hermanas la enseñanza de algunas asignaturas. Las circunstancias políticas - en 1931 se había proclamado la II República - determinaron que las Hermanas no vistieran hábito. Formaban la comunidad cinco Hermanas, Teresa Sanz de San Antonio, Mª Asunción Campo de San Luis, Zoila Ganzarain del Sagrado Corazón de Jesús, Concepción Gómez de la Ascensión y Lucrecia Isasi del Santo Ángel.

Inicialmente, la Academia se había abierto por vía de prueba, pero no tardó en quedar instalada definitivamente, de modo que se procedió a llevar a cabo las formalidades necesarias, aunque ya contaba con la aprobación del Prelado. Cuatro meses después fue nombrada Superiora la Madre Teresa Sanz.

Las primeras alumnas procedían del Colegio de Santa Teresa de Barraincúa, pero pronto se les añadieron otras muchas niñas de los alrededores. De forma anecdótica y sin poder precisar la fecha de las primeras admisiones, también se estableció un pequeño parvulario de niños que, posteriormente solían pasar al Colegio de Jesuitas, ya que ellos iniciaban la enseñanza en el nivel de Preparatorio, a los 7 años de edad aproximadamente. Tampoco podemos precisar el año de su término.

El 27 de septiembre de 1935 las Hermanas se trasladaron de Torreverde a los chalets formados por dos viviendas simétricas, Villa María y Villa María Dolores, propiedad de los señores de Allende. Ambas las adquirió la Congregación en diferentes tiempos. A la vez se habilitó un garaje adosado al edificio, que haría de capilla.

El 18 de marzo de 1937 se concedió la autorización oficial de apertura del Colegio Nuestra Señora del Carmen, con entrada por la calle Arechavaleta, junto a la plaza de Indauchu. Desde 1933 funcionaba como Escuela de Primera Enseñanza y como Escuela particular de Enseñanza Media desde 1939.

El colegio continuó creciendo y llegó el momento en que su capacidad resultaba insuficiente para tanta alumna y hubo que pensar en una nueva construcción. En 1957 el obispo de Bilbao, monseñor Gúrpide puso la primera piedra de la parte derecha del edificio actual, para lo que fue necesario derribar Villa Mª Dolores. Posteriormente, en 1963, continuó la obra tras el derribo de Villa María, logrando así la construcción actual.

Aparte de Cultura General, el colegio se fue adaptando a los distintos Planes Oficiales de Enseñanza hasta incluir los niveles conocidos de Preescolar, EGB y BUP. Posteriormente estos niveles prosiguieron bajo otras denominaciones tal y como establecía un nuevo plan educativo: Educación Infantil, Primaria y Secundaria (Obligatoria y Postobligatoria) . En un período lejano contó con Bachiller Laboral. El establecimiento de la Secundaria Postobligatoria permitió al colegio prolongar un año más su oferta, dado que el Bachiller ( 2 años ) anulaba el antiguo COU que el colegio no había ofertado anteriormente.

Para impartir la Enseñanza Secundaria Obligatoria (E.S.O) fue preciso solicitar una nueva autorización y cumplir con los llamados Requisitos Mínimos en Instalaciones etc... Así se procedió a construir en 1995 un gimnasio subterráneo de 432 m. cuadrados, y sus correspondientes vestuarios para chicos y chicas, ya que desde la década de los noventa el colegio tenía educación mixta. También se instalaron aulas específicas de dibujo, tecnología, música e informática.

Podríamos decir que el Colegio Ntra. Sra. del Carmen se muestra en todo momento en disposición de responder a las demandas educativas de la sociedad. Dio muestra de ello cuando en la década de los 90 introdujo el modelo B de euskera, cada vez potenciado con más fuerza, pero también el deseo de incorporar, igualmente, el aprendizaje de lenguas extranjeras, particularmente el inglés. Del mismo modo, se renuevan los métodos educativos y, con naturalidad y fuerza, se avanza en las nuevas tecnologías.

Por la misma disposición, y puesto que ya no quedaba más espacio, en los últimos años se ha procedido a derribar el antiguo y amplio Salón de Actos para establecer dos aulas del primer ciclo de Educación Infantil, concretamente para niños y niñas de 2 años. Esto ha sido una mejora importante y la demanda de plazas justifica la obra. Además, pudo construirse pequeño Salón de Actos para reuniones con familias, charlas o conferencias. Por otra parte, debido a la proximidad del Salón Parroquial, el Colegio puede realizar en él festivales navideños u otros con participación de los numerosos alumnos y alumnas.

Actualmente el colegio dispone de todos los niveles educativos, desde los 2 años a los 18 y cuenta también con un comedor escolar al que asisten numerosos niños y niñas, de todas las edades. Igualmente se imparte una diversidad de actividades extraescolares no regladas.

El colegio siempre ha pretendido y pretende una educación integral en valores, de acuerdo con el ideal de Santa Joaquina de Vedruna, Fundadora de las Hermanas Carmelitas de la Caridad Vedruna, y goza de un merecido prestigio en su faceta formativa, cultural y religiosa, destacando su especial afán misionero.

Apenas quedan Hermanas - por su edad- que puedan realizar la tarea educativa, pero los seglares, con el apoyo de la Entidad Titular, llevan adelante esta labor con los mismos ideales y empeño de la Congregación.

Mención aparte, pero que conviene no olvidar, es que durante una serie de años el colegio cedía sus instalaciones a la llamada Obra Social Teresita Gonzales Quevedo. Se trataba de una Escuela Nocturna que funcionaba de forma gratuita y con voluntariado que impartía diversas actividades: Escuela Hogar, Puericultura, Auxiliar de Clínica que les aportaba una pequeña titulación otorgada por el Departamento de Sanidad, etc.

Fueron muchas las jóvenes que, después de salir de sus trabajos, llegaban a la Escuela Nocturna para adquirir algunos conocimientos, desde costura hasta aquellos que les permitían dotarse de cierta profesionalidad. También en este terreno, la Obra Social Teresita González Quevedo estaba muy bien considerada.

La modernización y mejora del edificio continúa. Recientemente se han mejorado los accesos hasta llegar a cota cero, se ha ampliado un ascensor modificando la escalera y modernizado otro. Así,. poco a poco, también mejoran las instalaciones. Y con ilusión y trabajo, la obra sigue adelante.

( Notas del Archivo provincial y aportación de Hermanas)

Bilbao a 15 de noviembre de 2017