El Carmen Indautxu

Reflexión del Miércoles de Ceniza

El pasado miércoles 14 de febrero, después de Carnavales, celebramos el Miércoles de Ceniza, con el que damos comienzo a la Cuaresma, que es un tiempo de cambio, de renovación, de preparación para Semana Santa y para Pascua.

En el colegio queremos que sea un tiempo especial, por eso, nos reunimos en la capilla desde 3º de primaria a 2º de bachiller en diferentes celebraciones a lo largo de la mañana, para recordar que es un tiempo para ayudar y conectar con Jesús y con los demás. Renovamos nuestro compromiso por el objetivo que nos acompaña desde comienzo de curso: “Conviértete, sal al encuentro del otro y ayuda!"

Esas palabras nos enviaron a nuestro día a día dispuestos a transformar nuestro corazón. Queremos compartir con vosotros/as nuestra reflexión ese día. ¿Te animas a leerla? Y si te unes a nuestro compromiso, ¡compártela!

Hoy, Miércoles de Ceniza, comienza la Cuaresma.Después de los Carnavales, empieza el tiempo que llamamos de Cuaresma, que es un tiempo de preparación para Semana Santa y para Pascua.

Queremos que este tiempo sea un momento especial en el colegio. Queremos que sea un tiempo para ayudar, un tiempo especial para conectar con Jesús y con los demás ¿por qué?

Jesús a lo largo de su vida estuvo cerca de los que sufren, de los que están tristes, de los enfermos, de los que no tenían casa, de las mujeres, los niños y pecadores que estaban marginados, de los que no tenían muchas cosas para vivir… y le condenaron a morir en la cruz por defenderles, por estar con ellos, por apostar por ellos, por anunciarles la Buena Noticia de la salvación.

Mira cómo está hoy nuestro mundo. Hoy hay muchos que sufren por las guerras, porque se sienten solos, porque no tienen dinero suficiente para la hipoteca de su casa, o los que por pagarla, no tienen para dar de comer a sus hijos o comprarles lo que necesitan para ir a la escuela… Algunos, se encuentran entre nosotros…

Podemos decir: si Jesus estuviera aquí para hacer algo… Físicamente no está. Pero hoy Jesús nos tiene a nosotros y nosotros somos los que podemos llevar ese mensaje de alegría, de esperanza, de solidaridad…no sólo con palabras sino con gestos… ¡Siempre dispuestos a ayudar!

Si los que estamos aquí decimos que somos seguidores de Jesús, este es el tiempo para volvernos a conectar con Él. Jesús nos dice: Déjame estar en tu corazón, déjame estar en la raíz de tu interior…déjame estar en tus alegrías y en tus tristezas, en tus esperanzas y tus desengaños, en tus momentos buenos y tus momentos bajos… ¡Mira y escucha!

Donde el corazón.